Carta de lectores

¿Cómo hacemos para que todos seamos mucho más que dos?

Recientemente se publicó en www.pilardetodos.com.ar una nota de opinión en la que se analizaba el desempeño de la empresa Sudamericana de Aguas, la concesionaria del servicio de agua de red y cloacas en distintas áreas del distrito de Pilar (ver http://www.pilardetodos.com.ar/20100213/cartasudamericananota.html)

A modo de ampliar ese panorama y convocar a todos a hacernos partícipes de las problemáticas sanitarias del lugar donde vivimos, me gustaría profundizar algunos  aspectos.
En primer término, me pregunto; ¿A quiénes la empresa Sudamericana de Aguas le puso agua y cloacas en estos veinte años? Si la distribución hubiera sido justa, estos servicios hubieran llegado a toda la población pilarense, sin tener en cuenta el poder adquisitivo de los beneficiarios de esos servicios. Lamentablemente, esto no ocurrió. Basta acercarse a la oficina comercial de la empresa para ver en un llamativo cartel de vidrio el detalle de las obras realizadas en estos años. De allí se deduce que sólo se han extendido los servicios a barrios cerrados, countries y emprendimientos comerciales. En ellos la rentabilidad está asegurada, lejos de constituirse en un bien social. Para ejemplificar tomemos el caso de la planta depuradora de efluentes cloacales, en el barrio Beliera (Maquinista Savio), que sólo trata  efluentes de los más importantes countries de la zona y no beneficia a ninguno de los populosos barrios del área. Dentro de la ideología neoliberal se decía que al privatizarse agua y cloacas, todos iban a poder gozar  de estos servicios, por la falsa teoría del “derrame”. Esto no fue así.
Por otra parte, dentro del contrato de privatización figura la existencia de un ente regulador, que debería verificar la calidad del servicio. Al día de hoy, nunca funcionó. Por lo tanto, no sabemos, salvo por la opinión de la empresa y el silencio del municipio, qué calidad de servicio tenemos. El estado ha cedido su capacidad de control una vez más.
No olvidemos que salvo el Programa Nacional “Agua más Trabajo”, no se ha llevado agua y cloacas, y por añadidura salud, a los barrios más necesitados de ellos, por el sólo hecho de que no es lucrativo para la empresa. Es sabido que tanto  agua como cloacas son parte indivisible del concepto de salud. En este tema, el gobierno nacional supo ver en su momento, que la salud pública  no debía estar supeditada al  lucro empresarial, y en respuesta a ello, reestatizó Aguas Argentinas.
En nuestro distrito falta un debate profundo sobre el perfil que debe tener este servicio esencial, que evidentemente no es el vigente.

María Rosa Batalla
Lic. en Información Ambiental. Universidad de Luján
Especialista en Comunicación Científica, Médica y Medioambiental. Universidad Pompeu Fabra, Barcelona.
Docente e investigadora  de la UNLu.