Movilización en la puerta de la Municipalidad

Desesperado pedido de justicia por un joven asesinado en medio de una riña callejera

Recibió un tiro en la espalda cuando quería ayudar a un amigo que estaba siendo atacado por una patota. Los agresores están identificados, pero escaparon de las zonas que frecuentaban.  Ayer, familiares del adolescente se reunieron con autoridades policiales y el intendente.

Unas 50 personas se movilizaron ayer por la mañana por las calles de Pilar, en pedido de justicia por el asesinato de un joven baleado por la espalda en el barrio Santa Teresa de Pilar.
Familiares, amigos de Francisco Zapata,  ultimado el pasado 24 de enero, junto a organizaciones políticas, como el Polo Obrero, marcharon hasta la Comisaría y la Municipalidad de Pilar, para reclamar que los responsables del tremendo asesinato sean puestos tras las rejas.
Según relataron los padres de Francisco, de apenas 19 años, ese domingo 24, a las 6,30 de la mañana, el joven estaba acostado y escuchó que había una pelea y tiros al lado de su vivienda, y se levantó y vio que había un amigo al que estaba atacando una patota.
Cuando quiso separarlo lo mataron de un tiro a la espalda. Los asesinos no fueron ni siquiera detenidos por una vez, y ahora están desaparecidos.
“Él conocía a los asesinos, porque eran vecinos. Estamos acostumbrados a tener en las barriadas a estas bandas, que muchas veces son apañadas por la Policía. Y cuando se llamó a la patrulla esta dijo que no se podía hacer nada porque había sólo dos agentes en el destacamento”, señaló a Pilar de Todos una de las integrantes de la marcha.
El padre de Francisco, Antonio Zapata, se reunió ayer con el intendente Humberto Zúccaro y responsables de la Policía Distrital de Pilar. Tras más de una hora de reunión, el progenitor del joven asesinado señaló, sumamente compungido y lleno de bronca, que si no se hubiera hecho la marcha “todo seguiría igual”.
“Gracias a toda esta movilización, después de 9 días, me dijeron que hoy llegaron los expedientes a la Fiscalía y van a salir a buscar a los asesinos de mi hijo, que están identificados y todos sabemos quienes son. Pero si es necesario voy a venir todos los días a la puerta de la Municipalidad, y la única manera de frenarme va a ser que me metan un tiro en la cabeza. Mi hijo era bueno, trabajador, y porque quiso separar a unos asesinos que le estaban pegando a un amigo de él lo mataron cobardemente por la espalda. La Policía se comprometió también a darnos todo su apoyo, lo mismo que el intendente”, contó Antonio ante las personas que aguardaban en la puerta del Municipio.
Además, el papá del joven aseguró que la ambulancia demoró más de 40 minutos en llegar, y que en el Centro de Salud más cercano no había médicos.
Extraoficialmente, el Municipio desmintió esas versiones, y aseguró que el vehículo para trasladar al joven tardó 8 minutos en llegar, y que Francisco ya había perdido la vida cuando llegó al centro asistencial.
El propio Zúccaro, cuando se retiraba a la Ciudad de Buenos Aires, se bajó del vehículo en el que se trasladaba y dialogó con los vecinos y familiares de Zapata.