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En Del Viso
Familiares y amigos recordaron a Sonia Colman a un año del asesinato
Fue alcanzada por una bala policial. Allegados a la víctima aún reclaman justicia por el crimen. El uniformado está libre y acusado de homicidio “doloso”.
 El sábado pasado 23 de diciembre se cumplió un año del brutal asesinato de Sonia Colman, una vendedora ambulante que encontró la muerte a manos de un policía mientras trabajaba en el semáforo de Ruta 26 y Valentín Gómez de la localidad de Del Viso.
Y el sábado, familiares y amigos de la víctima la recordaron con un acto que se desarrolló en el mismo lugar en el que la mujer murió luego de haber recibido un disparo en el corazón perpetrado por el oficial Oscar Benítez de la comisaría 3º quien intentaba atrapar a dos delincuentes que huían en un automóvil.
Su marido, Antonio Espasa, sus hijas y compañeros se hicieron presentes para renovar con más fuerza aún el pedido de justicia para la mujer. Ese pedido es el que se repitió en varias oportunidades y en distintos lados, desde las fiscalías hasta la Gobernación provincial, con la realización de marchas y movilizaciones. Este año, además, los compañeros de Colman encararon la lucha para lograr el cambio de carátula de la causa que en la actualidad figura como «homicidio culposo”, es decir ´un accidente´. En reiteradas oportunidades, la abogada de la familia de la víctima, Gisela Bustos, insistió con que la carátula debe ser la de “homicidio con dolo eventual agravado”, la cual podría otorgarle al uniformado una pena de hasta de 25 años de prisión y al mismo tiempo lograr que el policía no espere el juicio en libertad.
“El oficial Benítez, en ningún momento preservó la vida de las personas que hace un año transitaban por este lugar, y es evidente que tuvo intención de matar y mató”. Es que el policía, disparó su arma de fuego al intentar interceptar a dos delincuentes que escapaban en un auto luego de robar una billetera con apenas 80 pesos, en pleno centro de la ciudad y con las calles atestadas de personas que en ese momento realizaban las compras en vísperas de la Navidad.
“Benítez sabía que podía matar y no le importó. Claro está que quería matar y mató; mató a Sonia Colman de un itakazo en el pecho que le atravesó el corazón”, repite sin cansancio Antonio Espasa quien durante el transcurso de este año tuvo que luchar también contra la impunidad de la que goza el asesino de su esposa.
“La causa sigue caratulada como homicidio culposo con lo cual Benítez continúa en libertad y, según sabemos, se desempeña como seguridad privada”, se indignó Espasa.
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