En la Provincia de Buenos Aires
Unas 500 mujeres con VIH quedaron embarazadas durante el 2008
Esos números reflejan que el territorio bonaerense concentra más de la mitad de los casos de VIH y Sida del país. Y según las autoridades sanitarias, lejos de estar en baja la epidemia se mantiene estable y crece entre las mujeres en edad fértil con menores recursos.
En lo que va del año se detectaron 500 embarazos en personas que conviven con VIH, por lo que el Ministerio de Salud provincial decidió tomar medidas que permitan fomentar el tratamiento antirretroviral en este grupo poblacional y capacitar a los ginecólogos para el abordaje de estos casos.
“Al principio de la epidemia los ginecólogos se limitaban a recomendar a las mujeres embarazadas que no tengan hijos y que utilicen preservativo en todas sus relaciones sexuales, hoy observamos que la realidad nos obliga a cambiar la actitud y el enfoque”, comentó Claudio Zin, ministro de Salud provincial.
Es que con la posibilidad de acceder a los tratamientos antirretrovirales y convivir con el virus como enfermedad crónica, “debemos comprender que, hoy por hoy, tenemos la obligación de sumar a las personas con VIH a la planificación familiar”, señaló Sonia Quiruelas, coordinadora del Programa Provincial de VIH/Sida.
Uno de los desafíos para los miembros del sistema sanitario es profundizar los testeos durante la gestación, hecho que permite iniciar cuanto antes el tratamiento con antirretrovirales y reducir las posibilidades de que el niño por nacer sea infectado por la madre -transmisión vertical-.
“Si una mujer embarazada con VIH no toma ninguna medida para prevenir la transmisión del virus a su hijo tiene un 20 por ciento de probabilidades de contagiar al bebé, en cambio ese porcentaje disminuye al uno por ciento si la mujer comienza a tratarse desde el tercer mes de gestación”, enfatizó Quiruelas.
El tratamiento no difiere demasiado del que lleva adelante una persona no embarazada, es decir, que se basa en la administración de medicamentos antirretrovirales. No obstante, en estos casos es conveniente planificar una cesárea -porque el pasaje por el canal de parto genera un mayor riesgo- y administrar el tratamiento al bebé.
Además, en el único caso en el que se desaconseja la lactancia materna es, justamente, en las mujeres con VIH por la alta concentración de virus que tiene la leche de la madre.
Datos de la Provincia
Desde el inicio de la epidemia en los años ‘80 a la fecha el Programa de Sida dependiente del Ministerio de Salud provincial registró 7.925 casos de VIH y 10.176 de Sida.
No obstante se estima que esas cifras sólo representan la mitad de los casos reales, en buena medida porque, pese a que es obligatorio notificar cada caso a las autoridades, muchos médicos no lo hacen y, por otra parte, se supone que existe un sector de la población que convive con el VIH sin saberlo.
En lo que va del año, la dirección de Epidemiología de la Provincia lleva registrados 267 nuevos de VIH y 61 casos nuevos de Sida, es decir, pacientes que han desarrollado alguna enfermedad de las llamadas oportunistas a raíz del déficit inmunológico.
A partir de los casos detectados en 2007 se pudo relevar que el 91% por ciento no tiene cobertura de obra social y el 70% estaba desocupado al momento de la detección del caso.
|