Tras la muerte de un trabajador
¿Por qué el gobierno ordenó guardar todos los vehículos Municipales?
Daniel Aguilar murió cuando el camión en el que se trasladaba colisionó por desperfectos técnicos contra un colectivo. El Municipio lo alquilaba a un particular y tras el hecho ordenó no mover los automotores de las delegaciones. ¿Qué quisieron esconder?
El silencio de las autoridades presentes no hacía más que acrecentar las dudas. El viejo camión Ford 600 con más de 25 años de antigüedad aún retenía entre sus hierros retorcidos al cuerpo sin vida de Daniel Aguilar.
“El camión no era del Municipio, era alquilado y prestaba servicios para la Delegación de La Lonja, pero no era nuestro”, se despegaban ayer algunos funcionarios municipales en estricto Off The Record.
“Se rompió la dirección, sólo un loco podía manejar un camión así”, murmuraba uno de los testigos, perteneciente también al Municipio, mientras recorría con la vista las ruedas traseras del camión, lisas y con grietas.
Tras el accidente de ayer (ver aparte), hay un punto clave que no debe ni puede dejarse pasar por alto. El nulo control vehicular que se le hace a la flota de camiones que prestan servicios para la comuna. Y otro más: ¿A quiénes les alquila el Municipio esos vehículos?
Tras el accidente, lo único que atinó a hacer la Comuna fue decretar el duelo por ayer y hoy. Pero hubo otra medida más que, entre las sombras, no hizo más que acrecentar las dudas. La orden fue clara y contundente: “guardar a todos los vehículos que alquila el Municipio hasta que se sepa qué pasó”.
Así fue que varios automotores fueron devueltos a sus delegaciones o dependencias de obras públicas, como el obrador. ¿A qué se debió esa decisión? ¿Se quiso esconder de la mirada pública y sobre todo de los medios de comunicación el estado de los otros vehículos que prestan servicios para la Municipalidad? ¿Quizá encubrir también a los dueños de esos vehículos que, sin los debidos controles, se trasforman en verdaderas máquinas de muerte?
Ayer eran varias las versiones que indicaban que el camión protagonista del accidente, que prestaba servicios en la Delegación de La Lonja, habría sido alquilado a un hombre cercano a la política local, aunque fuera de la estructura del gobierno. Para más datos, el presunto propietario del camión suele aparecer en cada campaña electoral, aportando su “estructura” para facilitar pintadas, pegatinas y reparto de boletas. Y de hecho no sería la única persona ligada a la política que estaría alquilando vehículos al Municipio. Otro rumor indica que incluso un funcionario de segunda línea del área de Obras Públicas haría lo mismo no sólo con camiones, sino con regadores, por ejemplo. ¿Es por eso que el Municipio decidió esconder todos los automotores?
Muchas preguntas que, lamentablemente, aparecen después de la muerte absurda y evitable de un trabajador municipal. ¿Alguien se atreverá a responderlas?
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