A siete meses del asesinato
Gatillo fácil: Piden justicia por Sonia Colman
Familiares y amigos realizaron un radio abierta en el centro de Pilar. Renovaron el pedido de justicia y pidieron cárcel para el oficial de la policía que disparó su arma, cuya bala fue a dar en el corazón de la vendedora ambulante.
Unas 150 personas se reunieron el sábado pasado para pedir justicia por el asesinato de la vendedora ambulante de Del Viso Sonia Colman, alcanzada por una bala policial.
La mujer recibió uno de los perdigones que salió de la escopeta del policía Oscar Benítez, cuando se encontraba trabajando en la esquina de las calles Madero Y Valentín Gómez, de Del Viso, una zona densamente transitada.
Con la modalidad de radio abierta, el esposo de Sonia, Antonio Espasa, y sus tres hijas, familiares de Sonia e integrantes de la entidad Madres del Dolor, Corriente Clasista y Combativa (CCC), Polo Obrero, Causa Peronista (de Diego Vivas), Suteba, Familiares de Sobrevivientes y Víctimas de Cromagnon, entre otros, se renovó el pedido de justicia para el asesinato.
En ese sentido, los familiares y amigos de Colman pidieron cárcel para el policía que efectuó el disparo tratando de detener a dos jóvenes.
El asesinato de Colman ocurrió el 23 de diciembre último cuando la mujer fue alcanzada por uno de los perdigones de la escopeta que disparó Benítez, en medio de una persecución que realizaba persona de la Comisaría 3ra. De Del Viso, en pleno centro de esa localidad.
Aquel día, cerca de las 15,30 una patrulla perseguía a un Fiat 147 en el que se trasladaban dos delincuentes que habían robado una billetera en Los Polvorines.
Pese a que el lugar estaba sumamente concurrido, uno de los uniformados, según Espasa de apellido Benítez, disparó la Itaka que llevaba consigo. Uno de los perdigones fue a dar contra un cartel, otro rozó la pierna de un joven y un tercero se incrustó en el corazón de Colman, hiriéndola de muerte.
Según Espasa los policías siguieron su persecución sin detenerse a revisar el estado de salud de la mujer.
Los delincuentes no habrían estado armados (se resistieron a los pocos metros), y el hombre que efectuó el disparo habría sido separado de la fuerza pero mantendría la libertad.
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