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Tras un encuentro en Capitán Sarmiento
Los comerciantes de Pilar, en alerta por la pelea entre el gobierno y el campo
La SCIPA participó de un encuentro de la Federación de Cámaras de Comercio e Industria zona norte de la provincia de Buenos Aires. Se declararon en asamblea permanente y pidieron a las autoridades nacionales “diálogo”.
 La Cámara de Comerciantes de Pilar (SCIPA), presidida pro el contador Daniel Castro, se mostró preocupada por el aún irresuelto conflicto que mantiene el gobierno nacional con un importante sector del agro.
Algunos miembros de la SCIPA, además de Castro, el Vicepresidente Primero, Alfredo Ventura; Pro Secretario, Alberto Moreira; y Vocal Titular, Jorge Doménech, participaron de un encuentro que en el marco de la Federación de Cámaras de Comercio e Industria zona Norte de la provincia de Buenos Aires, se realizó en la ciudad de Capitán Sarmiento.
“La Federación de Cámaras del Norte de la Provincia de Buenos Aires, FENORBA, integrada por 23 Cámaras de Comercio e Industria, mayoritariamente pertenecientes a regiones agropecuarias del Interior Bonaerense y ligadas económicamente a la actividad de este sector, entendemos, adherimos y nos solidarizamos con el sentir del campo”, señala el escrito difundido por la SCIPA.
“La situación por la que está pasando el país está perjudicando a todos y notamos que el consumidor se está frenando, lo que repercute en el nivel de ventas de todos”, agregó Castro en diálogo con Pilar de Todos.
El parte de prensa de la SCIPA señala que la entidad sostiene el “respeto por la Constitución Nacional, sus principios democráticos, republicanos y federales, y por las Instituciones e investiduras de la Nación; pero sin olvidar también el reconocimiento de los derechos individuales, la defensa de los intereses locales y regionales, y sin perder de vista las necesidades de todos los ciudadanos, buscando y proponiendo métodos que aseguren la equidad, la inclusión social y la dignidad de las personas”.
En el encuentro, que se llevó a cabo el 10 de junio pasado en la ciudad de Capitán Sarmiento, la SCIPA adscribió a los siguientes puntos:
- Que hemos pasado sin visos de solución más de tres meses de un conflicto cuyo detonante fuera un reclamo sectorial del sector agropecuario al Gobierno Nacional por las “retenciones móviles”, que se profundizó en un enfrentamiento alcanzando a la sociedad en su conjunto, afectando la economía, deteniendo el crecimiento, creando incertidumbre en la población, generando principios de desabastecimiento, disminuyendo la actividad económica, y profundizando aún más los problemas de "inflación" y "crisis energética" que ya estaban instalados en las ciudades del interior con anterioridad al mismo y aún perduran.
- Que la crisis e incertidumbre afectan seriamente los ingresos del comercio e industrias de estas localidades, en donde la actividad del sector en su conjunto ha disminuido notoriamente, alcanzando en algunas zonas y rubros entre el 25% y 50% de baja en las ventas, con las consecuencias que ello tiene en la cadena de pagos, descubiertos bancarios, cesantías y/o despidos, que colocan a nuestro sector en situación de alto riesgo.
- Que situaciones generada atenta directamente sobre la calidad de vida y bienestar de todos, paradójicamente frente a una inmejorable posibilidad de nuestro país ante la demanda alimentaria mundial.
- Que la gravedad de la situación es proporcional a la falta de respeto por los mecanismos institucionales formales y legítimos previstos por la legislación.
- Necesitamos que nuestros legisladores locales, provinciales y nacionales hagan propio el conflicto, propiciando el debate e instalando el mismo en los recintos deliberativos.
Esos puntos son los que llevaron a las cámaras de comercio e industria nucleadas en ésa Federación que se declaren en asamblea permanente, “ante el tremendo perjuicio que esta situación ha generado y sus perspectivas inciertas a futuro de no encontrarse rápidamente una solución”.
“Solicitamos la resolución urgente el conflicto del agro, entendiendo que debe ser el Poder Legislativo quién discuta y plantee las modificaciones a realizarse; reclamamos con la mayor energía y convicción a los poderes ejecutivo, legislativo y judicial e instituciones, el cumplimiento de la legislación, observando y haciendo observar una actitud de respeto mutuo y comportamientos de cooperación y reciprocidad; llamamos al estado nacional a cumplir con la obligación de convocar al diálogo en forma urgente a todos los sectores involucrados para la implementación de un Programa Agropecuario Nacional; apelamos a mantener abierto un diálogo proactivo y fructífero con todos y cada uno de los actores implicados en el diferendo, escuchando todas las ideas y respetando las diferencias, a fin de elaborar estrategias de desarrollo consensuadas que fortalezcan la paz social y afiancen el crecimiento del país; se haga llegar esta manifestación a la autoridades ejecutivas y legislativas Nacionales, Provinciales y Municipales”, enumeró la SCIPA.
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