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Crónica de una celebración inolvidable
Las Fiestas Patronales se convirtieron en un éxito rotundo
Con las actuaciones de Luciano Pereyra y Diego Torres más de 30 mil personas se acercaron a disfrutar de dos jornadas a pura música. El mal tiempo obligó a suspender el tradicional desfile cívico militar.
Las Fiestas Patronales en honor a la Virgen del Pilar se transformaron en un gran éxito y de la que pudieron disfrutar miles de personas. Figuras fuertes y consagradas de la música nacional, los tradicionales kioscos realizados por los alumnos de todas las escuelas del distrito, bandas locales, fuegos artificiales y la tradicional homilía en honor a la patrona de los pilarenses fueron momentos que quedarán grabados en las retinas de las más de 30 mil personas que acompañaron los festejos.
Las celebraciones comenzaron el viernes por la tarde, aunque por una mala pasada que jugó el tiempo el tradicional desfile cívico debió suspenderse. 
“Es una pena grande porque habíamos trabajado con todas las escuelas. Había mucha gente comprometida pero lamentablemente no lo hemos podido hacer”, manifestó con tristeza en sus ojos María del Carmen Rodríguez, titular de la Unidad Municipal de Gestión Educativa (UMGE) y quien año a año colabora con la organización del desfile por las calles de la ciudad.
Sin embargo pese a la lluvia, la expectativa estaba firme. A la tarde del viernes y ya avizorando que los días posteriores iban a dejar paso al febo triunfal, se realizó la tradicional homilía en honor a la patrona de los pilarenses. Presidida por el Monseñor Oscar Sarlinga, la misa contó con la presencia de todas las autoridades municipales y los vecinos devotos. Luego de los rezos del rigor, el recogimiento daba paso a la fiesta que prometía... y mucho.
A pasos apurados los chicos de los colegios armaron sus kioscos para que estuviera todo listo. Algunos, algo ofuscados se acercaron hasta el despacho del Intendente para pedirle elementos que ayudaran a paliar el barro que se había formado dentro del predio Bianea.
Todo estaba listo. Era el momento de recibir a los artistas: en primer lugar, el sábado pasadas las 21 llegó el momento de disfrutar de las canciones de la mano de Luciano Pereyra. “Si llueve será una bendición para el show”, había dicho momentos antes de subir al escenario y encontrarse con sus fans. Repasó éxitos consagrados y presentó temas de su último disco “Dispuesto a amarte”, en un show que se extendió hasta cerc a de la medianoche.
Todos se fueron pensando en un domingo que quedará en los anales de la historia pilarense. En el último día de la fiesta, Diego Torres llegó a Pilar y dejó una marca en las retinas de quienes se acercaron a escucharlo. Con una fuerte conexión con su público y un ritmo que contagió a todos, Torres conjugó sobre el escenario sus dotes de cantante y actor que fueron el comentario de los presentes.
No dejó de recordar la etapa de su infancia que lo ligó fuertemente a Pilar. “Tengo muchos amigos en estas tierras y me da una emoción enorme poder volver a estar cerca de los que formaron parte de una de las etapas más hermosas de mi vida”, dijo Torres frente a las cerca de 12 mil personas que colmaron el predio Bianea.
El agradecimiento del Intendente Zúccaro se vio reflejado en la entrega de un imponente Cristo Crucificado tallado, que quedó en manos del cantante.
Hubo llantos de emoción, gritos de devoción por los artistas y una enorme felicidad que hizo de los festejos un recuerdo que tardará mucho tiempo en desaparecer de la mente de los vecinos pilarenses.
Locales
Las bandas locales también tuvieron su espacio dentro del marco de la celebración.
Arroba y Pecado Original, Alexander, Ballet Iruya, La Gocera, Ballet Turay Bandeño, Cristina y Gustavo (danza tango), Jorge Machado, Rocío Rojas y Juan Cruz Berreta (danza tango), María Díaz y Julieta Rosso, entre otros presentaron sus trabajos ante el público presente.
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