Tras una tensa inspección
El gobierno clausura la tosquera de Roviralta
Fue porque la cantera infringía la ordenanza que prohibe la extracción de tierra negra y otros minerales, además de no contar con habilitación de minería. El ex de Susana Giménez adujo que allí se estaba construyendo una laguna. Recibió una fuerte multa.
El gobierno clausuró ayer por la tarde el predio en donde funcionaba de manera irregular la tosquera de Huberto Roviralta, en el paraje Santa Coloma, de Manzanares.
La decisión del Municipio se desencadenó luego de que se constatara la explotación sin habilitación de la cantera, cuya actividad, en Pilar está prohibida desde 1995.
Aproximadamente eran las 15 de ayer, cuando un grupo de inspectores de la Secretaría de Medio Ambiente y otro de la Dirección de Inspecciones de la comuna se apersonaron en Santa Coloma, y comenzaron a revisar el lugar, signado por un profundo pozo de entre 10 y 15 metros de profundidad, plagado de camiones y máquinas viales.
Mientras los inspectores intentaban llegar al lugar, los encargados del predio trataban impedir el paso de los funcionarios y la prensa que se acercó al terreno.
Roberto Airoldi, de Inspección, y Oscar Salom, titular de la cartera ambiental local, decidieron ingresar igual, sin esperar la llegada del encargado del predio, tal como reclamaban las personas que se apostaban en las puertas de entrada.
Más tarde, y luego de colocarle las fajas de clausura a media docena de máquinas y camiones que se encontraban en la cantera, Airoldi y Salom explicaron las razones de la clausura.
“(La tosquera) no cumplimentaba con las exigencias que pedía el municipio y tampoco tenía aprobación de la provincia de Buenos Aires, precisamente de la Dirección de Minería. Vamos a hacer inspecciones diarias para constatar que las excavaciones no vuelvan. El predio es propiedad de Roviralta, al que se le aplicará una multa que fijará el Juez de Faltas, en perjuicio de los daños”, informó Salom.
“Nosotros recibimos la denuncia en febrero y a partir de allí se exigió la documentación y al no acreditarla se derivaron las actuaciones a Obras Públicas y finalmente se concluyó con la clausura”, añadió el funcionario.
Minutos más tarde se presentó en el lugar un hombre, que dijo apellidarse Monti, quien adujo ser “el encargado del campo”, aunque deslindó responsabilidades respecto a la extracción de tosca.
“Yo soy amigo de Roviralta y si ustedes lo conocieran se darían cuenta que no es malo como dicen: están ensuciando a una persona que no tiene nada que ver y hace siete años que no viene al campo”, se enojó el hombre.
Sin embargo, el propio Roviralta aceptó en diálogo exclusivo con Pilar de Todos que era dueño del lugar y que sabía de la actividad minera que allí se realizaba.
De todos modos, el ex de Susana Giménez explicó a este medio que las excavaciones no perseguían fines comerciales, sino que tenían por objeto construir un barrio cerrado que tendría como principal atracción una enorme laguna “para los amantes de los deportes acuáticos” (ver aparte).
La cantera tiene una extensión de unas tres hectáreas y la explotación estaría a cargo de Gustavo Guitar, un hombre relacionado a algunas empresas de movimiento de suelo de la zona y quien también habría estado a cargo de la extracción que se produjo durante tres años en el predio de la ex Fábrica Militar, en donde supuestamente se iba a construir un barrio privado denominado Laguna Dorada que nunca se concretó.
Los vecinos aseguraban que por día veían salir cien camiones cargados de material, lo que perjudicaba el medio ambiente y comenzaba a repercutir en las napas freáticas.
Ayer, el intendente Humberto Zúccaro había asegurado que “por más que sea Roviralta o Juan Pérez” las tosqueras en Pilar estaban prohibidas, y prometía un cierre inmediato.
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