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Umberto Veronesi en el Austral
Uno de los más reconocidos oncólogos del mundo disertó en Pilar
A los 81 años, el doctor Umberto Veronesi es considerado una verdadera eminencia en el tratamiento del cáncer. Autor de 300 trabajos científicos, fundador de la Escuela Europea de Oncología y ex presidente de la Unión Internacional de Oncología, además de ex ministro de Salud de Italia.
"En la actualidad, podemos curar totalmente a la paciente en 24 horas”, asegura el Dr. Umberto Veronesi, uno de los especialistas más reconocidos en su lucha contra el cáncer, que ayer disertó en el Hospital Austral.
Veronesi, encabezó el IV Simposio Internacional de Cáncer de Mama, organizado en Pilar por el Hospital Universitario Austral, el Instituto Europeo de Oncología, la  Fundación Argentina Contra el Cáncer y la Sociedad Argentina de Mastología.
“Desarrollamos un método para reducir el acto quirúrgico y mantener la forma normal del pecho, evitamos la remoción de los ganglios axilares gracias a la biopsia del ganglio centinela y, gracias a un nuevo tratamiento, que es la radioterapia intraoperatoria, realizada cuando el paciente está aún durmiendo, le damos la dosis total de radioterapia en una sola sesión. Esta técnica se aplica a pacientes con pequeños tumores, de menos de 2,5 cm que no requiere una detección excesivamente precoz, sólo razonablemente precoz”, detalló Veronsi.
Veronesi comenzó su tarea siendo muy joven. "Empecé como estudiante -recuerda-. Fui al hospital oncológico de Milán y me sentí tan golpeado por la sensación de impotencia, de fatalismo, de sufrimiento, de dolor y de marginación de los pacientes, que decidí dedicar toda mi vida a esta enfermedad."
Para el especialista, hoy hay tres vías principales en la lucha contra el cáncer. "Una es identificar los genes mutados en la célula cancerosa. Son específicos y representan un «retrato» del tumor -explica-. Por eso estamos haciendo perfiles genéticos que pueden darnos información de si el cáncer es agresivo o no, si va a hacer metástasis o no. También estamos desarrollando drogas inteligentes que se dirigen sólo a estos genes mutados y sus proteínas, y evitan destruir las células normales. La segunda ruta es utilizar la revolución de las imágenes de diagnóstico que en la actualidad pueden identificar diminutos tumores proliferativos de hasta dos milímetros, en cualquier parte del cuerpo. Si podemos convencer a la población de someterse a evaluaciones anuales podríamos identificarlos precozmente y curarlos en el 95% de los casos. Una posible tercera ruta son las vacunas, porque estamos descubriendo más y más tumores producidos por virus". Y agregó: "Estoy seguro de que vamos a derrotar el cáncer. Pero no sé cuándo. Puede llevarnos décadas o más. Pero para una enfermedad que ha estado presente en este plantea por miles de años, no es mucho".
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