Opinión
Sensaciones de un concejal de Pilar en Misiones
Vinimos aun con un casi seguro triunfo del oficialismo con el “Sí”, pero convencidos de la necesidad de participar. Aunque se trataba de otra provincia, entendíamos que no sólo se elegían contituyentes en Misiones. Ésta era una carrera que nos afectaría de lleno, tanto en la provincia de Buenos Aires, como así en Nación…
Nos encontramos con una provincia que nos sorprendió por lo organizados que estaban para trabajar por el “No”, sin recursos, sólo vecinos y teléfonos que servían para pasar novedades y como única alternativa posible fiscalizar para evitar el fraude.
Concurrimos como políticos, es verdad, pero durante los días en que colaboramos, nos invadió una sensación que hace rato no sentíamos: el del deber cívico, que nos enseñaban de chicos en el colegio.
El aparato oficilista se manifestó a pleno, prepotente, casi impune, completo en mañas y recursos oscuros para intentar torcer cualquier voluntad.
Desde muy temprano del domingo circulaban por Misiones cientos, miles de autos con afiches del “Sí”, pegados. Así es, en Misiones para el gobierno no existía la veda política. En el distrito de 9 de Julio hasta los fiscales de mesa llevaban el uniforme amarillo del Intendente con las letras del caso.
Intendentes, legisladores, funcionarios, repartían alegremente dentro de las escuelas boletas, remeras, propagandas, papeles varios, remedios, etc.
Nuestra desazón no cesaba, sólo hacíamos conjeturas de lo que podía pasar en la provincia del sufrido pueblo misionero, de >Buenos Aires, de la Argentina toda.
Cerca del mediodía, un amigo me muestra a algunos electores y me dice: “Mirá, a esa gente no la mueve el aparato, aún pese el terrible calor, viene sola, vota y se va. Esa gente vota por el No”.
A partir de ahí la tendencia no se detuvo, vecinos, auténticos vecinos, no pararon de llegar hasta las 18.
18,10 ingreso a un aula que iniciaba la apertura de los sobres, rápido resumo con ayuda de los dedos, 10 votos por el “No”, 6 por el “Sí. Eufórico ingreso a otra aula, otra vez 10 “No”, 7 “Sí”, consulto otras escuelas y confirmo, esa es la tendencia.
Seis y media de la tarde era un hecho, ése era el resultado en toda la provincia.
Es lunes, estamos en Posadas, son las ocho de la mañana, aún no dormimos y me hago una sola pregunta acerca del resultado de ayer: ¿perdió Rovira, como escuché en los medios? No, ganó la dignidad de un pueblo como rezaba un cartel de San Martín en la pared de una escuelita de El Dorado en la que estuvimos.
Ganó la Democracia.
Hugo Quintero, concejal del Paufe |
|