Luego
de 11 meses de las elecciones de 2005
La
oposición quiere despertar y hace números para los comicios que
vienen
Sectores
del macrismo, el vecinalismo y otras agrupaciones comenzaron las
charlas para lograr alianzas. Y si bien admiten que "el camino
es largo y sinuoso", se lamentan: "Si nos juntábamos el año pasado
el escenario hoy sería otro".
Dicen
que el camino va a ser largo y sinuoso. Y la propia historia reciente
parece demostrarlo. Pero varias fuerzas políticas de Pilar que
jugaron en las últimas elecciones de 2005 iniciaron, tímidamente
por ahora, iniciaron el camino con vistas a robustecerse para
enfrentar la batalla electoral de 2007. Mientras desde el oficialismo,
vernáculo y no, prefiere posponer los tiempos para hablar de política,
la oposición, por lo bajo y en voz baja, quiere tomar la posta.
Y aunque todos coinciden en que el tiempo de hablar de las alianzas
aún está a años luz de distancia, sí admiten que el objetivo final
es ese: un frente local que se le anime al gigante oficialista.
En concreto, ya han comenzado a haber contactos entre el vecinalismo,
el macrismo y algunas agrupaciones que probaron suerte en las
últimas elecciones. "Hay algo real, sí se hacía una alianza entre
alguno de los partidos que ahora estamos empezando a abrir el
diálogo nuevamente, el escenario sería otro; por lo menos dos
concejales habríamos metido, contra dos menos para el oficialismo",
hizo números uno de los referentes de las fuerzas que en las últimas
semanas han iniciado, dicen, "el largo camino del acuerdo". El
final, sólo el tiempo lo sabe. De todos modos, la condición es
una: "Que el acuerdo sea programático, y no sólo electoral". "Si
queremos cambiar las cosas, unidos es mejor que separados, pero
no sirve juntarnos sólo para sumar y después de las elecciones
se termina todo, sino que debemos asegurarnos un proyecto que
podamos cumplir más allá de los tiempos electorales", opinó Juan
Carlos Romero, de la Agrupación Popular Independiente (API). El
encuentro se habría llevado a cabo en las instalaciones del Club
Unión, el fin de semana pasado. Contó con representantes del Pro,
API, Tiempo de Vecinos y referentes del Partido Nacional Constitucionalista,
cuyo candidato en el 2005 fue Carlos "El pollo" Mongelós, hoy
del lado del macrismo. Algunos, incluso, sueñan con un frente
mucho más amplio que incluya en lo local a sectores como el ARI
y la UCR que rechaza la concertación K, una alquimia que hoy parece
difícil, si no es que imposible, de conjugarse con éxito. "La
ecuación es fácil: si todos hubiéramos estado juntos superábamos
tranquilamente la línea del PJ y nos acercábamos incluso al Paufe,
que juntó 13 mil 900 votos. Y no estamos contando a la UCR ni
al ARI, que también tienen las puertas abiertas", invitan desde
el macrismo. "Yo siempre busqué abrir el diálogo con otras fuerzas
y hay muchas cosas que nos unen. El tiempo dirá si a tal punto
de formar una alianza", expuso, por su parte, Eduardo Macchiavelli,
ex candidato a concejal por el Pro, y uno de los hombres fuertes
del macrismo en la primera sección electoral.
Cautela en el Paufe
Si bien las alianzas en el ámbito local desde lo teórico no necesariamente
deben estar atadas a lo que se concrete a nivel provincial o nacional,
se sabe que "lo que se diga desde arriba" va a ser finalmente
el camino a seguir. Desde el Paufe, aunque sí aceptan que una
alianza va a lograr equilibrar la balanza en donde se miden las
fuerzas -esa que hoy tiene como único ganador al oficialismo-,
prefieren la cautela y, claro, imponen "el proyecto" a las necesidades
electorales. "Antes de alianzas prefiero hablar de proyectos e
ideas para Pilar. Si es algo para juntar votos y después del recuento
se termina todo y cada uno por su lado no sirve, lo que necesitamos
no solamente son bancas o puestos, sino programas sensatos que
sirvan para mejorar la calidad de vida de los pilarenses", expuso
Luis Patti (h), edil del Paufe, una fuerza a la que le está costando
reagrupar a varios de los referentes que se sumaron en el 2005.
De hecho, varios saltaron al macrismo y otros, directamente, ven
la política más lejos que cerca. "La gente cada vez se interesa
menos en la política y eso es algo que también es culpa de nosotros,
los dirigentes", aceptó Patti y completó: "Por eso una tarea nuestra
es lograr la confianza de la gente y afianzar programas y medidas
de fondo". Poco a poco, casi a tientas por ahora, la oposición
a comenzado a mover la pesada rueda política. Esa misma que el
oficialismo quiere mantener detenida, pero que tarde o temprano
volverá a mover a toda la dirigencia. El final, sólo el tiempo
y la madurez con que se encaren las charlas lo van a determinar.
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